Gedicht
José Luis Díaz Granados
MANUEL JOSÉ
Manuel José, your aunts and friends called you.I am also going to call you that
because we are now equals in our adulthood.
Besides, we were friends, good friends, compadre,
and if you look well you will see that in all my poetry,
so serious and solemn, I always call you father,
my father, compadre, but that mournful poetry
has accomplished its mission, just in time, MJ.
Sometimes, when walking on solitary streets
at night, I see your shadow and I rejoice, and it is my shadow.
In the morning, when I look at myself in the mirror
I suddenly see your brown eyes under my eyebrows,
and I shudder, how strange, and I’m frightened.
And when I talk in a low voice, I hear you, Dad.
When I lovingly caress my son’s hair
I feel your caress on my hair as a small boy . . .
Manuel José, life is beautiful, I tell you now:
I would like to recount so many incidents that would make you rejoice
and I no longer know where to begin, there are so many things,
and sometimes I think I am your life all over again,
and then, I have no doubt about it, I begin a long monologue
and time passes telling you this and that,
and the coffee gets cold, Manuelito, and night falls . . .
© Translation: 2009, Nicolás Suescún
MANUEL JOSÉ
MANUEL JOSÉ
Manuel José, así te decían tus tías y tus amigos.Yo también te voy a llamar en esa forma
porque ya somos iguales en esta edad adulta.
Además, siempre fuimos amigos, muy amigos, compadre,
y fíjate bien que a lo largo de toda mi poesía
tan grave y solemne, siempre te llamo padre,
padre mío, compadre, pero aquella poesía funeral
cumplió ya su misión, justo a tiempo, Emejota.
A veces cuando camino por calles solitarias,
de noche, veo tu sombra y me alegro, y es mi sombra.
En las mañanas, cuando me miro ante el espejo
veo de pronto tus ojos castaños bajo mis cejas,
y me estremezco, ah caramba, y me asusto.
Cuando hablo en voz baja, yo te escucho, papá.
Cuando acaricio, amoroso el cabello de mi hijo
yo siento tu caricia en mi cabello de niño . . .
Manuel José, la vida es hermosa, te lo digo ahora:
quisiera contarte tantos episodios que te harían gozar
y no sé ya por donde empezar, hay tantas cosas,
y a veces yo siento que soy nuevamente tu vida
y entonces, no lo dudo, comienzo el monólogo largo
y me pasan las horas contándote esto y aquello
y el tinto se enfría, Manuelito, y la noche cae . . .
© 1984, José Luis Díaz Granados
From: El laberinto
Publisher: Ediciones Esquina 2000,Colección "Túpac Amaru,"- 3, Bogotá
From: El laberinto
Publisher: Ediciones Esquina 2000,Colección "Túpac Amaru,"- 3, Bogotá
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MANUEL JOSÉ
Manuel José, así te decían tus tías y tus amigos.Yo también te voy a llamar en esa forma
porque ya somos iguales en esta edad adulta.
Además, siempre fuimos amigos, muy amigos, compadre,
y fíjate bien que a lo largo de toda mi poesía
tan grave y solemne, siempre te llamo padre,
padre mío, compadre, pero aquella poesía funeral
cumplió ya su misión, justo a tiempo, Emejota.
A veces cuando camino por calles solitarias,
de noche, veo tu sombra y me alegro, y es mi sombra.
En las mañanas, cuando me miro ante el espejo
veo de pronto tus ojos castaños bajo mis cejas,
y me estremezco, ah caramba, y me asusto.
Cuando hablo en voz baja, yo te escucho, papá.
Cuando acaricio, amoroso el cabello de mi hijo
yo siento tu caricia en mi cabello de niño . . .
Manuel José, la vida es hermosa, te lo digo ahora:
quisiera contarte tantos episodios que te harían gozar
y no sé ya por donde empezar, hay tantas cosas,
y a veces yo siento que soy nuevamente tu vida
y entonces, no lo dudo, comienzo el monólogo largo
y me pasan las horas contándote esto y aquello
y el tinto se enfría, Manuelito, y la noche cae . . .
From: El laberinto
MANUEL JOSÉ
Manuel José, your aunts and friends called you.I am also going to call you that
because we are now equals in our adulthood.
Besides, we were friends, good friends, compadre,
and if you look well you will see that in all my poetry,
so serious and solemn, I always call you father,
my father, compadre, but that mournful poetry
has accomplished its mission, just in time, MJ.
Sometimes, when walking on solitary streets
at night, I see your shadow and I rejoice, and it is my shadow.
In the morning, when I look at myself in the mirror
I suddenly see your brown eyes under my eyebrows,
and I shudder, how strange, and I’m frightened.
And when I talk in a low voice, I hear you, Dad.
When I lovingly caress my son’s hair
I feel your caress on my hair as a small boy . . .
Manuel José, life is beautiful, I tell you now:
I would like to recount so many incidents that would make you rejoice
and I no longer know where to begin, there are so many things,
and sometimes I think I am your life all over again,
and then, I have no doubt about it, I begin a long monologue
and time passes telling you this and that,
and the coffee gets cold, Manuelito, and night falls . . .
© 2009, Nicolás Suescún
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